Blog
|
Contrátanos si estás dispuesto a que te digamos que no

Contrátanos si estás dispuesto a que te digamos que no

Cuando una marca decide buscar una consultora de branding o comunicación, hay una pregunta fundamental que debería hacerse desde el principio:

¿Buscas una empresa que se limite a ejecutar lo que le pidas, o un equipo que piense y construya contigo, aunque eso implique recomendarte algo distinto a lo que tenías en mente?

La diferencia entre ambas opciones marca un antes y un después en los resultados de cualquier proyecto de marca.

Branding no es cumplir encargos. Es pensar en el negocio

Como consultora, no entendemos nuestro trabajo como una simple ejecución de tareas. No estamos aquí solo para diseñar un logotipo bonito, escribir una frase con gancho o elegir una gama de colores atractiva. Eso es cumplir un encargo. Y sinceramente, no es nuestra manera de trabajar ni de entender la construcción de una marca.

Creemos firmemente que el branding, el de verdad, parte del asesoramiento estratégico, del análisis profundo, de formular las preguntas adecuadas —incluso las incómodas— y de tener el criterio y la valentía de decirle a un cliente: “Esto no te conviene, aunque te guste.”

Asesorar es una forma de cuidar

Muchos clientes llegan tras experiencias frustrantes con agencias que solo han ejecutado sin cuestionar, o con diseñadores que entregaron un logo sin entender a qué se dedicaba la empresa. El resultado: una marca sin coherencia, sin dirección y, sobre todo, sin impacto.

Por eso, para nosotros el acompañamiento estratégico es clave. Una marca no puede construirse únicamente desde los gustos personales de quien la lidera. No se trata de lo que a ti te gusta, sino de lo que necesita tu negocio y de lo que conecta con tu audiencia.

Estrategia frente a opinión

Es normal que un CEO, emprendedor o directivo tenga ideas, intuiciones o preferencias. Y por supuesto, las escuchamos. Pero también es necesario entender que esas ideas, si no se contrastan con una estrategia sólida de comunicación, pueden llevar a una marca débil, genérica o alejada de su público.

Como consultores en comunicación y estrategia de marca, nuestra labor no es simplemente aceptar todo sin más. Nuestra función es analizar, proponer, argumentar y, si hace falta, discrepar.

No por orgullo, ni por ir en contra. Sino porque queremos que cada decisión esté respaldada por un criterio profesional, no por una preferencia subjetiva.

Aportar valor es saber decir que no

Tener un equipo que diga “sí” a todo no es necesariamente una ventaja. A veces, decir “no” es la decisión más valiente y, paradójicamente, la que más valor aporta. Especialmente cuando ese “no” va acompañado de una alternativa mejor, basada en la experiencia y en una visión estratégica del negocio.

Contratar una consultora de branding solo tiene sentido cuando buscas algo más que ejecución. Cuando necesitas que alguien te acompañe en la toma de decisiones importantes, con argumentos, perspectiva y compromiso con el resultado.

¿Ejecutora o consultora?

Así que, si estás en proceso de construir o redefinir tu marca, te animamos a que te hagas esta pregunta:

¿Quiero alguien que simplemente me haga caso, o alguien que me diga lo que realmente necesita mi marca, incluso cuando no sea lo que yo esperaba oír?

Porque si buscas lo primero, probablemente necesites un proveedor.

Pero si buscas lo segundo, necesitas una consultora estratégica, que piense contigo, que te escuche, que te rete y que te ayude a construir una marca con sentido, coherencia y futuro.

Y ahí es donde empieza el verdadero trabajo de branding.

Impulsamos tu negocio

Cuéntanos tu proyecto